Martín Alonso Borrego Llorente presentó este martes su renuncia a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) tras ser señalado por organizar una boda en el Museo Nacional de Arte (MUNAL) en octubre. Aunque Borrego no confirmó que el evento fuera nupcial, lo describió como “privado”.

Borrego Llorente ocupaba el puesto de Coordinador de Contacto con la Ciudadanía bajo la dirección de Alicia Bárcena. En su carta de renuncia, expresó: “Presento mi renuncia de manera voluntaria con carácter irrevocable y efectos inmediatos, al puesto de Coordinador de Contacto con la Ciudadanía (…) Lo anterior, ante las versiones periodísticas sobre el evento realizado el 4 de octubre de 2024 en el Museo Nacional de Arte (…) que involucran al suscrito”.

El exfuncionario aclaró que la celebración fue privada, pagada con recursos personales y cumplió con las normas del museo. Sin embargo, admitió que usar su correo institucional de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), cuando era jefe de Oficina, para solicitar el espacio fue inapropiado. “Ese actuar no fue digno de la confianza depositada en mí. Lamento haber fallado y que esto afecte a la institución”, señaló.

Semarnat toma distancia del caso
La titular de la Semarnat, Alicia Bárcena, afirmó que no autorizó ni tuvo conocimiento de la solicitud que Borrego realizó al MUNAL mientras trabajaba en la SRE. Según un comunicado, Bárcena pidió la renuncia inmediata de Borrego por considerar que su acción contradice los principios de austeridad y equidad que caracterizan a la actual administración. Además, reiteró que no se utilizaron recursos públicos para el evento.

Detalles de la boda en el MUNAL
Medios de comunicación informaron que en octubre se realizó una boda en el MUNAL. Borrego, quien entonces trabajaba en la SRE, habría contraído matrimonio en septiembre con Ionut Valcu, jefe de misión adjunto de la Embajada de Rumania en México. Posteriormente, celebraron en el museo.

El embajador de Rumania en México, Marius Lazurca, publicó una fotografía de la pareja portando prendidos florales típicos de bodas, lo que avivó la polémica en redes sociales y medios.