
El rapero Kendrick Lamar fue el encargado del espectáculo de medio tiempo del Super Bowl 2025, ofreciendo una presentación impactante en el Caesars Superdome ante miles de asistentes y millones de televidentes.
La puesta en escena incluyó un coche en el centro del estadio y un escenario inspirado en los botones de un control de PlayStation, acompañado por luces blancas y moradas. Lamar estuvo respaldado por un grupo de bailarines vestidos en rojo, blanco y azul.
El actor Samuel L. Jackson sorprendió al público al presentar al rapero y hacer apariciones durante el show. Entre las canciones interpretadas destacaron Egoist y All Stars, esta última en colaboración con SZA, quien subió al escenario como invitada especial.
Uno de los momentos más inesperados fue la aparición de la extenista Serena Williams, quien se sumó al espectáculo con una rutina de baile.
El show cerró con Not Like Us, uno de los temas más esperados por el público, conocido tanto por sus premios como por la polémica en torno a los versos que hacen referencia a la rivalidad entre Lamar y Drake.
